lunes, 27 de agosto de 2012

Teclado de palabras.



Un larga alfombra de colores blanco y negro. Una noche fría y las notas comienzan a sonar. El viento sopla y los bemoles arrancan de las manos del compositor. Una que otra pide ayuda urgente a la nota más cercana pero cada uno vuela por su cuenta.
Solo en un cuarto blanco. Las palabras gritan memoria, hechos y momentos que marcan la historia. Las notas vuelven no arrancan y sienten como cada sonido generado es una lagrima de sangre. Una melodía de 6 años. 6 de muertes y sacrificios de una raza por otra. Lo peor de la  raza humana expresada en tan solo segundos mediante la decisión de dividir familiar e imponer ideas.
Las armas, los aviones, los gritos, las violaciones, los cohetes, los lanzallamas y las personas… todos tienen sonidos ¿Cómo escapar el sonido antes tales acontecimientos?
La  gravedad y la velocidad de cada nota expresan más sonidos y  movimientos, estas expresan historias de sangre,  horror y sufrimiento.
Cada tecla manchada en una gota de sangre, cada derramamiento de sangre una nueva partitura.
La historia se repite.Teclado de palabras.

Un larga alfombra de colores blanco y negro. Una noche fría y las notas comienzan a sonar. El viento sopla y los bemoles arrancan de las manos del compositor. Una que otra pide ayuda urgente a la nota más cercana pero cada uno vuela por su cuenta.
Solo en un cuarto blanco. Las palabras gritan memoria, hechos y momentos que marcan la historia. Las notas vuelven no arrancan y sienten como cada sonido generado es una lagrima de sangre. Una melodía de 6 años. 6 de muertes y sacrificios de una raza por otra. Lo peor de la  raza humana expresada en tan solo segundos mediante la decisión de dividir familiar e imponer ideas.
Las armas, los aviones, los gritos, las violaciones, los cohetes, los lanzallamas y las personas… todos tienen sonidos ¿Cómo escapar el sonido antes tales acontecimientos?
La  gravedad y la velocidad de cada nota expresan más sonidos y  movimientos, estas expresan historias de sangre,  horror y sufrimiento.

Cada tecla manchada en una gota de sangre, cada derramamiento de sangre una nueva partitura.

La historia se repite.





Tema:  Ballade No.1 Op.23 - Chopin

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