viernes, 21 de enero de 2011

Un novelista en un segundo.

Santiago y sus historias nuevamente.


Sofía recorría Parque Forestal a la mirada de los tipos de la esquina. Su filosofía de vida era dejarse llevar por aquello que el destino le tuviera preparado. Eduardo Thompson esperaba ansioso el café que había pedido en el local al que cada sábado iba. Tenía a su derecha el diario como cada viernes en la mañana y esperaba encontrar un artículo escrito por él, que además era de gran importancia.
Antonia sentía el viendo frio en cada momento en que el columpio se abalanzaba atrás y adelante. Sentía el esplendor de la infancia. Sentía el amor a la felicidad que ello le causaba. Miguel Ángel en tanto comenzaba a tocar su melodía con su amor, era ese instrumento que yacía en sus manos desde que tenía 8 años. Era su violín, cuyo nombre era Anastasia en honor a la hija del Zar Nicolás II de Rusia.

El turco, aquel como era conocido por toda la villa tenia abierto el almacén como los 365 días del año, las 24 horas y se encontraba a la espera de sus clientes.
Carlos Andrés se aproximaba al rio luego de saber de su próxima cesantía.
Juan, barría las hojas de ese parque tan inmenso.
Julia Leiva leía "100 Años de Soledad", a su lado se encontraba Antonia su hija de 7 meses, quien dormía como un ángel en el coche azul que le había regalado su madrina.

Miguel rezaba mientras corría por plena avenida para no llegar tarde a su trabajo luego de un complicado taco en una de las calles principales de la capital. Corría como un maratonista, y ya pensaba en postular a Running próximamente.
Jesús quien a todos salvaba, se elevaba por los cielos por medio del ascensor para comenzar a trabajar en la oficina 35, que se encontraba en el piso 50.

Finalmente yo estoy acá escribiendo las muchas cosas que pasan en mí alrededor. Junto a mi bolso negro, mi pañuelo verde y mi gorra verde de 2500 pesos.

Un día más
Un día más de historias, de cuentos y de esas cosas que nos contaron los viejos novelistas de una ciudad que tiene mucho más que decir cada día.

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