lunes, 4 de octubre de 2010

No sé cómo decirtelo.

No sé cómo decirlo...
Trataría de gritarlo si es que supiera que escuchas mis palabras, pero todo cae y es en vano.
Nos vemos por medio de un espejo y no le encuentro lógica a nuestras conversaciones. Pero aún así me encantas, no sé... tienes ese algo.. Eres preciosa cuando ríes, tu mirada angelical me consuelo y tus ojos son la llama ardiente de un mujer inteligente y guerrera.
Si pudiera te daría a conocer todas las palabras que el mundo pudiera deletrear en las más diversas formas del lenguaje que la Historia nos a dado a conocer. Si fuera escultor te miraría como la obra perfecta de la creación de un dios y si fuera santo pensaría que tu eres mi dios. Eres la reencarnación del ángel bendito en mi puerta que llama a tu consuelo.
Me siento completamente enganchado por las cadenas de oro de las cuales sin querer me atrapaste y piensas, ¿que nada de esto es posible? No sé como fuimos a parar del cielo a este lugar..., No sé como caíste del mundo de las ideas a mi realidad en esa cueva sin darme cuenta de lo que existía más allá de mis ideas. Comprendí entonces que existías y que eras la verdad de mi vida, de mi juventud y del momento.
Te prometo risas, cantos y poemas si tan solo me dieras una respuesta a lo que te pido, si tan solo me dijeras sí, asepto. Te juro que haría todo lo posible hasta el punto de llegar a cocinar y comprar solamente para complacerte y hacerte feliz ya que solamente y sin que tu lo sepas me haces feliz con su sonrisa, tu alma frente a la mía mirándonos mutuamente encontrando el verdadero fin de la existencia.
Creo que ya he sufrido mucho y me merezco por alguna vez algo bueno, no hablo ya del karma ni otro temas, quiero saber que algo bueno es posible y del que no existan factores del que nos separe. Necesito tu respuesta ante una demanda. Me siento como el comerciante vendiendo un producto de calidad y sintiendo pena del que nadie le compre. Siento que hago algo mal...¿Pero ese mal cual sería? Necesito una respuesta a mi pregunta. Y tú que eres mi inspiración debes darte cuenta de cuánto muero por saber quién eres y que me des una respuesta tan simple a mi demanda. No te pido que aceleremos el tiempo. Solamente te pido que me comprendas y que nos tomemos el tiempo para lograr quizás seguir el camino que todo individuo sigue para encontrar la felicidad junto a quien ama.

Tú sin saberlo eres la persona que me mantiene despierto cada día. Pienso en ti como nunca he pensado por alguien y me imagino quizás recorrer este mundo junto a ti a la espera de lo imposible y de lo creativo y de lo mágico de son las cosas sin que podamos verlas. Si solamente me dieras la oportunidad podría decirte en metáforas las cosas que quisieras pero no más entenderías por que solamente yo entendería las cosas que siento y que no sabes cómo me cuesta tanto dártelas a conocer.

Qué más puedo decirte
Eres la mujer ideal, mi mujer ideal. Aquella que sin saber me lleva a la locura.

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